Asociación Mexicana de Juzgadoras exige frenar violencia contra el Poder Judicial

Una alerta se enciende en el corazón del sistema de justicia mexicano. Este fin de semana, la familia de una jueza de Distrito fue agredida en su domicilio particular. Aunque no se reportaron daños físicos, el mensaje detrás del ataque es claro: la violencia ha alcanzado una nueva dimensión, y apunta directamente a quienes garantizan el acceso a la justicia.

La Asociación Mexicana de Juzgadoras, A.C., emitió un comunicado urgente para expresar su profunda indignación y condena ante lo que consideraron “un cobarde atentado” que vulnera no sólo la seguridad personal de la juzgadora, sino la integridad del Estado de derecho.

La agresión ocurrió a plena luz del día, frente a la familia de la juzgadora, lo que, según el pronunciamiento, deja en evidencia el alarmante nivel de violencia e impunidad al que están expuestas las juezas en México, particularmente aquellas con posturas críticas en debates sensibles, como la reforma judicial.

“No queremos pensar que este hecho constituye una forma de represalia por su postura crítica frente a la reforma judicial en curso”, advierte el texto, pero añade que no puede descartarse ninguna hipótesis.

Ante ello, la Asociación exige a las autoridades federales y estatales:

1. Investigar con celeridad y transparencia, sin excluir líneas de investigación que consideren el contexto judicial.
   
2. Brindar protección inmediata y efectiva a la juzgadora, su familia y colegas en riesgo.
   
3. Esclarecer las motivaciones del ataque, dado el carácter sensible de los casos que ella instruye.
   
4. Establecer protocolos especializados de seguridad para mujeres juzgadoras, en un país donde ser mujer y ejercer justicia se ha vuelto un riesgo.
   

El comunicado también llama a no guardar silencio ante la escalada de violencia contra operadores judiciales. “Nuestra sociedad merece juezas y jueces independientes, valientes y protegidos”, reitera la Asociación, mientras recuerda que “atentar contra una juzgadora es atentar contra la justicia misma y contra la democracia”.

Este posicionamiento se suma a una serie de preocupaciones expresadas por juezas, jueces y organismos internacionales frente al creciente hostigamiento judicial y político en México. El contexto no es menor: las reformas al Poder Judicial han polarizado el debate público, y han generado señalamientos por parte de juzgadores que ven amenazada su autonomía.

Las juzgadoras mexicanas, concluye el comunicado, se declaran en alerta permanente y dispuestas a defender con firmeza su integridad y su función constitucional, en un país donde ejercer la justicia no debería ser un acto de valentía solitaria, sino una garantía del Estado.

“Atentar contra una juzgadora es atentar contra la justicia misma”