COPPPAL condena censura en México y denuncia persecución a periodista en Campeche

La libertad de expresión en México enfrenta una de sus etapas más oscuras en años recientes.

Por ello, la Comisión de Comunicación de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL) expresó su profunda preocupación por lo que considera un clima de censura creciente en el país, tanto para periodistas como para ciudadanos.

En un pronunciamiento contundente, la COPPPAL denunció el uso de herramientas judiciales para acallar voces críticas. Un ejemplo alarmante es el caso de Jorge Luis González Valdez, exdirector del Diario Tribuna en Campeche, vinculado a proceso por “incitación al odio y la violencia” tras publicaciones críticas hacia la gobernadora Layda Sansores. La jueza Guadalupe Martínez Taboada no solo lo vinculó a proceso, sino que también le prohibió ejercer el periodismo y ordenó el cierre del medio, una decisión sin precedentes que, según la COPPPAL, “solo se ha visto en dictaduras”.

El organismo también condenó la aprobación en Puebla de la llamada ley de ciberasedio, considerada por activistas como un instrumento de censura que permite criminalizar las críticas al gobierno en redes sociales. 

Para la COPPPAL, esta ley viola el derecho fundamental a la libre expresión, protegido tanto por la Constitución mexicana como por tratados internacionales.

A esto se suma la discusión actual en el Senado sobre la nueva Ley de Telecomunicaciones, que de aprobarse permitiría al gobierno bloquear plataformas digitales, censurar contenidos y acceder a información privada sin supervisión judicial. La COPPPAL ha sostenido reuniones con defensores de derechos digitales y partidos de oposición, quienes han expresado su temor de que esta ley abra la puerta al control estatal de internet.

“Lo que ocurre en Campeche y Puebla es una alerta para toda la región. La democracia mexicana está siendo vulnerada por decisiones judiciales, leyes regresivas y una permisividad peligrosa frente al autoritarismo”, advirtió la Comisión.

Finalmente, el organismo llamó a la sociedad civil, medios y organizaciones nacionales e internacionales a denunciar estos hechos y exigir la garantía del derecho a informar y a disentir. Porque sin libertad de expresión, no hay democracia.